miércoles, 15 de febrero de 2012

Investigan posible dopaje en el último Consejo de Ministros.

Los análisis de orina se hicieron por sorpresa

 

La sospechosa rapidez con la que el Consejo de Ministros elaboró la nueva reforma laboral, además de su inusitada agresividad, junto a las sonrisas injustificadas y las miradas vacías de algunos de los ministros han sido las causas por las que el juez ha ordenado un control antidoping sorpresa a la totalidad de los miembros del último Consejo de ministros celebrado el pasado viernes en la Moncloa. Según las primeras pruebas se podrían haber encontrado indicios de clembuterol, LSD, ketamina, éxtasis, oxitocina, viagra, kriptonita y ponche Caballero. Al parecer, la policía tuvo que emplearse a fondo para recoger las muestras de orina debido a la resistencia de algunos de los ministros y del propio Mariano Rajoy, que se negaban a orinar sino lo hacían en presencia del Rey o de Ángela Merkel. Varias docenas de porrazos les hicieron conformarse con el auto del juez y proporcionar a la policía hasta doscientos cincuenta centilitros más de los necesarios. Un equipo de toxicólogos de la policía norteamericana de El Paso llegará a España en las próximas horas para colaborar en los análisis de las muestras, pues, según parece, se han encontrado hasta cuarenta y siete elementos no identificados, algunos de ellos de colores poco habituales en la naturaleza y que podrían incluso llegar a explotar o comprometer el equilibrio de la tabla periódica. Por otro lado, un veinte por ciento de la orina extraída a la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, se enviará en un furgón blindado al ministerio de Defensa y se guardará en un silo subterráneo hasta que la humanidad consiga establecer contacto físico con alguna civilización exterior.

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